Esos famosos que no se desviven más que por los juegos de casino…

Algunas de las estrellas que usted admira pueden ser grandes adeptos de los casinos. Entre las personalidades a las cuales les encantan los juegos de azar, los hay que desfilan a menudo por las alfombras rojas de Hollywood, mientras otros viajan por el mundo intentando arramblar con todos los trofeos de su disciplina deportiva favorita… Cuando se tienen los medios para apostar sumas vertiginosas en el blackjack o en el póquer, es evidente que la diversión toma un giro mucho más excitante.

Finanzas ilimitadas y la indiferencia por perder

Un puñado de profesionales del deporte que ha evolucionado al más alto nivel no ha ocultado jamás su gusto por los juegos de azar. Michael Jordan y Tiger Woods se encuentran entre ellos. Sus ingresos mensuales equivalen a los jackpots que salen a juego cada semana en las loterías americanas. Esos ingresos astronómicos les permiten ser derrochadores; hay que añadir que cuando apuestan, no fingen. Los campeones de baloncesto y de golf que mencionamos, no son auténticos virtuosos de los juegos de azar, al contrario que otros, pero se lo pueden permitir. Puede que se los encuentre usted alguna vez en una mesa de High-Roller en Las Vegas o en Atlantic City…

Otros famosos poseen habilidades que podrían convertirlos en futuros campeones de póquer. Toobey Maguire y sobre todo Matt Damon ya han participado en torneos profesionales y siempre terminan muy bien clasificados. Desgraciadamente, en el caso de algunas estrellas, los juegos de casino se convierten en una especie de adicción. La atractiva Paris Hilton pasa la mayor parte de su tiempo en los círculos de juego. A menudo ebria, se entretiene apostando a voz en grito, como para indicar que tiene un presupuesto ilimitado (lo cual es evidentemente el caso).

Una retahíla de apostantes domingueros

Podrá extrañar que Floyd Mayweather, Charles Barkley y John Daly tengan también como pasatiempo principal los juegos de casino. Estos incondicionales apuestan sus fortunas personales por diversión, un poco a imagen de Tiger Woods y de Michael Jordan. Puede que sean los grandes perdedores de la historia desde un punto de vista puramente mediático mientras que otros atletas de muy alto nivel sobresalen de igual manera en los juegos de cartas y de mesa. Así Gerard Piqué, el emblemático defensa del FC Barcelone, es tan bueno al fútbol como al póquer. Los famosos tenistas Becker y Hansen se han reconvertido también a esta disciplina y poseen un cierto talento para robar el bote a sus adversarios. Los Michael Jordan, Tiger Woods así como las otras leyendas del deporte tienen a qué atenerse.