¿Hacia una mayor aceptación de los casinos online en 2013?

Desde de mucho tiempo, los casinos virtuales sufren una mala reputación. No sólo son duramente criticados por los operadores de juegos de azar terrestres, sino que también se les reprocha a menudo no respetar las condiciones de seguridad requeridas. Además, el número de casinos online ilegales sigue en aumento, lo que molesta profundamente a los gobiernos. Sin embargo, profundas modificaciones podrían cambiar la imagen que se tiene de los casinos en internet en 2013.

Oportunidades concretas para los operadores

Hace mucho que se espera la coronación de los casinos online en Europa. A menudo acusados de ilegales, inseguros o fraudulentos, su imagen no ha cesado de verse empañada durante el curso de los últimos años. Sin embargo, numerosos expertos y analistas anuncian que 2013 podría ser el año de los casinos virtuales. En efecto, dos cambios radicales importantes deberían mejorar la reputación de los operadores de juegos de azar en internet. El primero de esos cambios concierne a las numerosas legislaciones que se han puesto en marcha en todo el mundo para legalizar las actividades de apuestas online.

Mientras New Jersey parece haberse convertido en el primer estado federal americano en el que se legaliza el póquer online, Suiza buscará pronto extender su legislación para autorizar los casinos online en su territorio. Uno de los organismos de regulación internacional más influyentes, la Kahnawake Gambling Commission, ha criticado regularmente el hecho de que demasiados jugadores online europeos se mostraban ofendidos porque querían jugar sobre plataformas en el extranjero. En efecto, el acceso a los juegos de ciertos operadores les está prohibido. Parece que los esfuerzos se ponen actualmente en revertir esa tendencia.

Les casinos online ahora rentables

El segundo cambio tiene un peso enorme también en la balanza. Pese a que los casinos online no habían sido muy solventes en el pasado, ahora disfrutan de un modelo económico que los hace mucho más creíbles. Algunos operadores han tenido que declararse en bancarrota y se ven en la incapacidad de hacer frente a los pagos a sus jugadores, pero esos tiempos han cambiado. En efecto, varias empresas no dudan en apostar por el éxito de los casinos online e inyectan con gusto fondos a la espera de sacar beneficio de unos ingresos cada vez más atractivos. Estas inversiones financieras demuestran la confianza plena que tienen las sociedades hacia los operadores de iGaming.

Añadamos a esto que cada vez más sitios de juego de azar virtuales se sienten preocupados por los problemas de adicción y dependencia de los jugadores. Este comportamiento proteccionista que es muy apreciado en el seno de los mercados regulares dice mucho sobre la voluntad de los operadores de alzarse como actores irreprochables en la escena internacional.