¿No está el juego de azar online vacunado contra la crisis económica?

En este paisaje inquietante de la crisis económica, los operadores de juegos de azar online parecen comportarse extrañamente bien. Sin embargo, la situación bien podría cambiar en vista de la competencia que se intensifica día a día en este sector. Uno llega a preguntarse si las empresas iGaming están realmente inmunizadas contra la crisis financiera.

Varios indicadores de un frágil equilibrio

Los juegos de casino y de póquer no fueron legalizados hasta 1976. En ese momento tales entretenimientos sólo estaban jurídicamente autorizados en Atlantic City y en Las Vegas, dos regiones que ahora albergan algunas de las mayores compañías de juegos de azar, como Wynn o incluso MGM Resorts. Si las apuestas hípicas y caninas ya eran muy populares, el blackjack, el baccarat y las máquinas tragaperras no tardaron en conquistar el corazón de los adeptos a los juegos de azar desde 1980, diez años antes de que Internet se democratizara y permitiera a los operadores ofrecer sus servicios en la web.

Hoy en día, en los EE.UU., mientras que solamente en los estados de Utah y Hawai no existe ni un juego legal, se constata que hay un aumento real del número de casinos virtuales que ofrecen sus servicios a través de Internet. La competencia que existe en la web puede poner en peligro la estabilidad financiera de los operadores de casinos terrestres en Las Vegas o Atlantic City. Pese a que la ciudad de Nevada parece remontar suavemente la cuesta desde el mes de enero, no hay que olvidar que las pérdidas de ingresos han sido tremendas para los establecimientos de juego americanos desde 2009.

Varias medidas adoptadas para perseguir un mayor crecimiento

Pese a la difícil situación económica y a las numerosas dudas subyacentes, observamos que hay un cierto crecimiento en los mercados europeos y asiáticos de iGaming. En Europa, varios estados han instaurado planes que han permitido la legalización inmediata de los juegos de azar en Internet. Como en todo nuevo sector, los ingresos generados por los juegos de azar online son forzosamente prometedores y alentadores. En Alemania y España, varios programas comerciales tratan de promover estos juegos con la esperanza de poner remedio a las deficiencias vergonzosas de los gobernantes.

En Asia, las noticias también son muy buenas. Regiones como Singapur, Macao o Tailandia atraen todos los trimestres a millones de turistas y jugadores extranjeros entre los cuales se encuentran las más grandes fortunas del mundo. Aún más, ningún imponderable parece tener efecto sobre el excelente clima económico de esos países. Más bien al contrario, los inversores se apresuran a conquistar nuevas cuotas de mercado y a tratar de aumentar sus cifras de negocio, que solía ser de menor rango desde la violenta ola de crisis que se originó en 2009.